El método de las sales Schüssler consiste en el uso de minerales que ya se encuentran de forma natural en nuestro organismo, y que son necesarios para el desarrollo de gran cantidad de procesos vitales.
El principio de ésta técnica no es la suplementar para cubrir directamente una carencia con su toma, más bien se trata de estimular el propio organismo para favorecer la regulación en la absorción y la distribución de los minerales que ingerimos a través de los alimentos. Así pues, cuando tomamos las sales y dejamos deshacer los comprimidos debajo la lengua, éstas son absorbidas con mayor facilidad y llegan al torrente sanguíneo, y con ello a las células, con mayor rapidez que las sales que se encuentran en la comida (que hacen todo el recorrido del tubo digestivo). De esta manera el organismo aprende a reconocer la sal como algo que necesita y se potencia la absorción de ésta misma en el proceso de digestión del alimento que la contiene.
Por lo tanto, se trata de una metodología que se fundamenta en los procesos bioquímicos y en el metabolismo celular. Como buena técnica naturopática, su acción consiste en ofrecer al propio organismo una pequeña ayuda en forma de estímulo para que éste recupere el equilibrio natural por sí mismo.
Las sales de Schüssler principales son 12, y a pesar que sus localizaciones y funciones en el cuerpo son muy amplias en todas ellas, una buena forma de presentarlas es esta:
- Nº 1 Calcium fluoratum: La sal de la elasticidad.
- Nº 2 Calcium phosphoricum: La sal de los huesos y los dientes.
- Nº 3 Ferrum phosphoricum: La sal de los primeros auxilios
- Nº 4 Kalium chloratum: La sal de las membranas mucosas.
- Nº 5 Kalium phosphoricum: La sal de la mente y el sistema nervioso
- Nº 6 Kalium sulphuricum: La sal de la inflamación crónica.
- Nº 7 Magnesium phosphoricum: La sal contra los calambres y dolores.
- Nº 8 Natrium chloratum: La sal del equilibrio de los fluidos corporales.
- Nº 9 Natrium phosphoricum: La sal del equilibrio ácido-base.
- Nº 10 Natrium sulphuricum: La sal detoxificante y depurativa de hígado y riñón.
- Nº 11 Silicea: La sal del cabello, las uñas y la piel. Y sal comodín para todas las alteraciones.
- Nº 12 Calcium sulphuricum: La sal de los procesos depurativos.
Yo las descubrí en el primer curso del graduado en naturopatía, y desde entonces he hecho uso de ellas en muchísimas ocasiones. He comprobado su efectividad incluso en personas que tenían ”poca fe” en ellas y en los remedios naturales en general.
Se trata de una de mis técnicas favoritas, junto con la fitoterapia, y que está presente en la mayoría de los tratamientos que propongo a las personas que acompaño. Además no tiene efectos secundarios, ni presenta interacciones con ningún medicamento ni remedio natural.