Blog

albaraque naturopatia remedios naturales

Una mirada natural a la hipertensión arterial

Entre los desequilibrios cardiovasculares existe uno que acapara especialmente la atención por su condición de enfermedad común: la hipertensión.

La hipertensión se produce por un aumento de la presión arterial, ya sea en la máxima (sistólica) o en la mínima (diastólica), que se asocia a dos mecanismos principales: un aumento del volumen de sangre y la contracción o disminución del diámetro de los vasos sanguíneos.

Factores relacionados con los hábitos de vida y la dieta intervienen directamente en ese buen funcionamiento. La obesidad, el sedentarismo o una dieta excesiva en sal sódica, grasas saturadas y azúcares pueden favorecer la aparición de la hipertensión. Es importante destacar que este desequilibrio no se relaciona únicamente con el consumo excesivo de sal en la dieta, sinó que problemas en el sistema de transporte de esta sal en el cuerpo pueden tener las mismas consecuencias.

La realidad es que tenemos muchas más variables que participan, y son diversas las condiciones que nos afectan a nivel circulatorio. La genética, evidentemente, tiene su papel pero no debemos olvidar que somos mucho más resultado de lo que nosotros creemos que somos, que de lo que nuestros genes dicen que somos. Los factores psicoemocionales deben ser muy considerados en estos desajustes. El estrés y nerviosismo alteran directamente el sistema nervioso y activan el modo simpático (estado de alerta). Este estado se rige por el instinto de supervivencia en el que se ve aumentada la frecuencia cardíaca y se envía más sangre hacia el cuerpo, aumentando también la presión arterial. El mismo estrés también tiene efecto sobre el sistema endocrino y, a su vez, las hormonas también condicionan la circulación. Por tanto, todo el tándem hormonal de nuestro cuerpo, con intervención de nuestras emociones como también del sodio, la glucosa y muchos otros elementos, tiene también un efecto directo sobre la tensión arterial.

La intoxicación con tabaco, alcohol y metales pesados, así como el estreñimiento, las lesiones a órganos vitales, las afecciones renales, la menopausia, la arteriosclerosis, la diabetes mellitus, el embarazo y el consumo en exceso de algunos alimentos y proteínas pueden conducir también a fenómenos que elevan la presión arterial.

En el acompañamiento natural de la hipertensión podemos ayudarnos de remedios que tienen acción diurética para poder eliminar más orina (en la que encontramos sales y agua) y así favorecer la reducción de volumen y de presión de la sangre. Por otra parte, tenemos también la opción de facilitar la circulación dentro de los vasos, por este motivo, en función del caso, podemos complementar el trabajo con el uso de remedios con acciones vasodilatadoras e hipotensoras.

La dimensión psicoemocional la trabajaremos sobre todo con adaptógenos. Estos remedios modulan nuestro sistema nervioso y el estrés. Además tienen acción reguladora sobre el sistema endocrino y favorecerán todo el equilibrio hormonal. De cara al anochecer, también se pueden recomendar remedios con propiedades calmantes que nos conducirán a un descanso regenerador por el cuerpo, la mente y el corazón.

Por último, podemos valorar la necesidad de recurrir a las propiedades anticoagulantes para aumentar la fluidez de la sangre y facilitar su movimiento. Sin embargo, ojo, en estos casos es especialmente necesario accionar bajo la supervisión de un experto, ya que los remedios pueden tener interacciones diversas y está totalmente contraindicado utilizarlos si ya se está tomando medicación para tal fin.

Para hacer todo este trabajo nos ayuda el ajo, el espino blanco, la seta reishi, la tila, las hojas de olivo y la lavanda. Se convierten en formas naturales de apoyar el cuerpo ante el desajuste que van más allá de lo que se entiende por fisiológico.

Por último daremos un poco de luz al enfoque psicosomático. La hipertensión arterial se relaciona con todo lo reprimido, lo que no se ha dicho ni afrontado y que queda atrapado en nuestro interior convirtiéndonos en una «olla a presión».

Te resuena este enfoque de salud y bienestar? Deseas aprender más sobre la perspectiva holística de los «males comunes»? Puedes informarte sobre mis servicios de asesoramiento y contactarme si deseas iniciar un proceso de tratamiento natural o necesitas poner luz sobre algún asunto, te responderé en menos de 48 horas encantada!

Scroll al inicio